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Por primera vez, un reportaje periodístico da cuenta de la situación actual sobre el asesinato de mujeres en México. Con datos oficiales, la reportera Valeria Durán elaboró una radiografía sobre el número de personas del sexo femenino víctimas de homicidio en el país y cuántos casos son catalogados como “feminicidio” en cada estado, además de exponer distintas historias de vida truncadas y las lagunas jurídicas que frenan a la justicia.
Por ejemplo, la investigación presentada por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad exhibe que la Fiscalía General de Chihuahua se reservó la causa de muerte de 754 mujeres asesinadas de enero de 2012 a noviembre de 2016 en la entidad, lo cual impide saber cuántas fueron víctimas de feminicidio.
La entidad ocupa el segundo lugar en la tasa de personas del sexo femenino víctimas de homicidio a nivel nacional, con 7.87 por cada 100 mil habitantes, solo superado por Guerrero, que registra 11.93, según los datos del informe “Las muertas que no se ven: el limbo de los feminicidios”.
Le siguen Colima, con 6.93, Baja California con 6.54, Baja California Sur con 6.23, Morelos con 4.95 y Estado de México con 4.88.
La media nacional es de 3.87, de acuerdo con las estadísticas de las 32 fiscalías y procuradurías estatales citadas en el documento.
“Chihuahua no pudo informar el número de feminicidios ya que es el único estado del país que sigue sin reconocer esta figura dentro de su Código Penal Local”, indica la investigación.
La Fiscalía estatal “tampoco dio detalles de cómo murieron estas mujeres. El argumento fue que para informar a detalle la causa de muerte de cada una de ellas se necesitaría más tiempo para checar carpeta por carpeta”, añade.
De enero de 2012 a junio de 2016, en el país, se cometió el homicidio de 9 mil 581 mujeres, de las cuales mil 887 fueron tipificados como feminicidio (19 por ciento) por las autoridades ministeriales.
El reporte señala que 7 mil 694 mujeres asesinadas a balazos, descuartizadas, violadas sexualmente, asfixiadas o golpeadas, no fueron reconocidas por como víctimas de feminicidio.
“Los hoyos negros de los sistemas judiciales en México han provocado que, durante los últimos cuatro años, los responsables de asesinar de manera violenta a miles de mujeres –incluso descuartizadas o asfixiadas– no siempre sean procesados y, en su caso, castigados con hasta 70 años de prisión por feminicidios”, según Valeria Durán, autora de la investigación.
Para obtener una radiografía completa se solicitó información a cada una de las procuradurías y fiscalías del país, a través de la Ley General de Transparencia, tanto de homicidios dolosos como de feminicidios, explicó la organización.
“En estas solicitudes se le pidió a las entidades especificaran si los cuerpos de las víctimas tenían rastro de violencia sexual, mutilaciones, quemaduras y de ser posible incluyeran la causa de muerte”, indicó.
Agregó que “a pesar de que se solicitaron datos estadísticos, en ocho entidades mantuvieron las causas de muerte y características como información reservada o confidencial”.
La investigación fue realizada por Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad en colaboración con el Centro Internacional para Periodistas y la plataforma Connectas, una instancia que aporta recursos y herramientas para realizar reportajes de fondo.
El reportaje completo puede consultarse aquí:
