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Durante la investigación para localizar al periodista Moisés Sánchez Cerezo, privado de la libertad el 2 de enero de 2014, las autoridades de Veracruz localizaron un cadáver el lunes por la noche, el cual no ha sido identificado.
Entre tanto, 11 policías municipales de Medellín fueron arraigados en un hotel del puerto de Veracruz, sujetos a investigación por la desaparición forzada del periodista, informó la Procuraduría estatal.
También se informó que la Fiscalía Especializada en Delitos contra a Libertad de Expresión (Feadle) de la PGR interviene en el caso de Moisés Sánchez , pero no se ha determinado si atraerá la investigación.
El procurador de Veracruz, Luis Ángel Bravo Contreras, dijo que el cuerpo encontrado sin vida la noche del lunes en Soledad de Doblado, en estado de descomposición, no se puede asegurar que corresponda al director del semanario La Unión y tampoco se puede descartar.
Sobre el móvil de la desaparición forzada, dijo:
“La línea más sólida de investigación va en torno a la relación que existe entre esta persona y el alcalde, pues es sabido por todos que eran constantes las críticas a la administración municipal y demás demandas que respaldaba Moisés, sin embargo, hasta el momento no hay fecha para que se le llame a declarar al alcalde y tampoco queda descartada la posibilidad”, dijo.
En una conferencia de prensa en las oficinas de la Procuraduría de Justicia Veracruz, el funcionario dijo que no es la actividad periodística la que generó diferencias con el munícipe y existen pruebas de que criticaba las obras no realizadas.
También aludió a una supuesta colusión de policías municipales con delincuentes. Hasta la fecha, han rendido declaración 36 policías municipales de Medellín, de los cuales 11 continúan arraigados en un hotel de la ciudad de Veracruz, sujetos a investigación en torno al caso, explicó el procurador Bravo Contreras.
De acuerdo con el titular de Servicios Periciales, por el deterioro y estado de descomposición del cadáver localizado el lunes, el proceso de identificación “podría durar de tres a cuatro días, incluso meses (…) se tienen ya las muestras de sangre de un familiar de Moisés y con ello seguiremos trabajando”.
