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La Procuraduría de Justicia de Guanajuato publicó los retratos hablados de los agresores de la periodista Karla Janeth Silva, corresponsal de El Heraldo de León en Silao, Guanajuato. La reportera, de 24 años, fue atacada el jueves 4 de septiembre.
Ese día, tres hombres armados atacaron ayer las oficinas de El Heraldo de León en el municipio de Silao, agrediendo directamente a la corresponsal Karla Silva. Ya habían ido a buscarla en ocasiones anteriores, hasta que la encontraron a las 17:30 horas. La Fiscalía Especial de la PGR inició una averiguación previa por delitos contra la libertad de expresión.
El mensaje que le llevaban fue: “Para que le bajen de huevos a sus notas” y remataron dirigiéndose a la recepcionista “dile que es para que le baje a sus notas”. A Karla le dieron de puñetazos y puntapiés, y con un objeto con el que le abrieron la frente.
El ataque, inédito contra la libertad de expresión en la historia del estado de Guanajuato, fue presenciado por la asistente de la oficina, quien fue sometida. A ella no la golpearon, sino que la hicieron entregar un radio, cuatro teléfonos y 500 pesos; se llevaron además una computadora.
El Heraldo ha sido crítico en contra de la administración municipal de Silao, caracterizada por su opacidad y por no haber respondido a las demandas de sus ciudadanos en cuanto a servicios públicos y principalmente seguridad. Aunque el ataque se perpetró a unas cuadras de Palacio Municipal y relativamente cerca de las instalaciones de la Policía, ésta tardó en llegar y en sus teléfonos jamás contestaron los llamados de auxilio.
Les comparto mi poema, inspirado en la garantía majestad del ser humano, la . . .
LIBERTAD DE EXPRESION
“Pobre voz confinada a ser oída en la nada”
Voces encadenadas
a silencio tan cruento,
las almas condenadas,
el callar es tormento.
Obrar con libertad,
garantía majestad,
libertad de expresión,
sueño de mí Nación.
Obstruye el pensamiento
la maldita censura,
limita el intelecto,
es del diablo su hechura.
El miedo paraliza,
el cerebro agoniza,
pobres hombres silentes,
todos son insipientes.
Dictadura en la cumbre,
ya se hizo costumbre,
legislando se abraza
la pinche “ley mordaza”.
Prohibir información,
cegar puntos de vista,
la perversa intención
de “estadistas” fascistas.
Que la boca cerremos,
quieren esos cabrones,
que dientes apretemos,
“chitón” a las razones.
¿Expresarte? . . . ¡jamás!,
nada puedes decir,
tal vez se escuchen más
tus quejas al morir.
El yugo del bozal
llegó a la yugular,
si te impiden hablar
las ideas desangrar.
Más, el ser de conciencia
no lo permitirá,
pues perdiendo su esencia,
a servil llegará.
Un pueblo sometido
siempre será vencido,
represión del gobierno
¡mandémosla al averno!
Venturoso aquel día,
en que, sin cobardía,
usemos la palabra
sin censura macabra.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Para Brozo . . .
Registro INDAUTOR 03-2008-101313351700-01