viernes , 19 abril 2024
Home » Libertad de Expresión » La ONU y la libertad de prensa en riesgo por el crimen organizado

La ONU y la libertad de prensa en riesgo por el crimen organizado

Con la relatora de Libertad de Expresión de la OEA, Catalina Botero, el Relator Especial sobre la Promoción y Protección del Derecho a la Libertad Opinión  y de Expresión de la ONU, Frank La Rue, realiza una visita a México para presentar un informe sobre la situación de la libertad de prensa en el país. En esta entrevista, La Rue explica porqué busca extender la Resolución 1738 sobre protección de los periodistas en conflictos armados a zonas donde actúa el crimen organizado.

La siguiente entrevista la realizó Marta Molina para la revista Periodistas, de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España, número 21, verano de 2010 (ver: www.fape.es). El relator de la ONU visitó las principales zonas de conflicto por el crimen organizado, como Ciudad Juárez, Chihuahua, y Culiacán, Sinaloa, en una misión que por primera vez realiza en conjunto con la relatora de Libertad de Expresión de la OEA, Catalina Botero.

“Pretendo ampliar la protección de periodistas”

Por Marta Molina

Frank La Rue, guatemalteco con apellido francés, es el primer latinoamericano en asumir la Relatoría Especial de Naciones Unidas para la Libertad de Expresión, cargo que ocupa desde 2008. Propuesto al Premio Nobel de la Paz en 2004, ha hecho del derecho de los pueblos indígenas a la información su particular batalla. Periodista y abogado, se declara especialmente preocupado por el creciente número de profesionales asesinados y está decidido a extender la Resolución 1738 sobre protección de los periodistas en conflictos armados a zonas donde actúa el crimen organizado.

La primera década del siglo XXI trae bajo el brazo un gravísimo deterioro de la libertad de prensa. El panorama es más bien sombrío.

La existencia de sistemas jurídicos restrictivos, las presiones políticas, comerciales y sociales, la falta de tolerancia al pensamiento crítico por parte de los gobiernos y la necesidad de implementar más y mejores mecanismos para incorporar a los excluidos, como por ejemplo los pueblos indígenas, son retos urgentes a resolver en la próxima década. El primer paso para lograrlo es reivindicar la libertad de expresión como un derecho de todos, sin restricciones. También en lo que respecta al periodismo ciudadano. Internet proporciona información valiosa que no llega por otros soportes. Hay que consumirla con precaución, pero no deja de ser un instrumento de la democracia.

En cuanto a la violencia sobre los periodistas, existen dos realidades bien diferenciadas: conflictos armados y crimen organizado. La situación es crítica. La violencia bebe de distintas fuentes. El Estado tiene la obligación de investigar los hechos. El silencio es impunidad y la impunidad genera más violencia. Cada caso que no se resuelve es una invitación a que vuelva a suceder. En este sentido, aplaudo la labor de la Fiscalía mexicana para la Atención de Delitos cometidos contra Periodistas.

¿Cuáles son los peores países para la libertad de prensa? ¿Coinciden con aquellos donde escasean las garantías judiciales?

Coincide con Estados débiles, donde no funciona la aplicación de la Justicia. La reparación pasa por fortalecer el sistema y sus garantías, desde los instrumentos de los organismos internacionales hasta las garantías que emanan de los ordenamientos nacionales. El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó en 2006 una resolución [1738] para la protección de los periodistas en zonas de conflicto armado que he planteado que se extienda a lugares donde actúa el crimen organizado.

Honduras es hoy el territorio más peligroso para ejercer la profesión. ¿Por qué?

Viajé a Honduras tras el golpe. Vi con mis propios ojos cómo se reprimía a Radio Progreso y a otros medios. Totalmente inaceptable. La Relatoría emitió un comunicado fechado el 10 de agosto en el que certificaba que en Honduras “no existe una forma sistemática de documentar los hechos, las detenciones ni lo casos de exceso de fuerza o de tortura, por lo que ni el pueblo hondureño ni la comunidad internacional tienen acceso a información objetiva”. Fue un golpe militar de consecuencias nefastas.

Pese a los graves atentados cometidos en otras latitudes en materia de libertad de prensa, Latinoamérica se coloca en una de las peores posiciones.

No es cierto que ocupe una de las peores posiciones. La violencia contra periodistas es un tema eminentemente mexicano, la censura un asunto cubano… Pero lo más grave es la sobrecomercialización de la información. La concentración de los medios en pocas manos atenta contra la pluralidad informativa, contra el derecho a recibir información diversa.

En la realidad de los periodistas mexicanos no se atisban mejoras. Cada vez son más los casos de profesionales desaparecidos y las amenazas y la irrupción de los violentos en las redacciones se han convertido en el pan nuestro de cada día. ¿Hay motivos para la esperanza?

La situación es realmente difícil pues los periodistas tienen miedo, no hay mecanismos eficaces para protegerlos y tampoco las investigaciones de los crímenes ofrecen resultados contundentes. Sin embargo, el Gobierno ha tomado conciencia del problema. En pocos meses, haré una visita oficial con la relatora de Libertad de Expresión de la OEA, Catalina Botero, que esperamos ayude a las autoridades a afrontar esta gravísima realidad.

Con todo, la región ha realizado avances en materia de libertad de expresión.

Hay un periodismo muy ágil, que fue cogiendo músculo en los años ochenta, periodo de graves conflictos en la región. Se han dado mejoras que no podemos dejar de reconocer, pero también hay desafíos que es urgente afrontar, con una acción decidida de la sociedad civil y los Estados.

Uno de los asuntos que más ampollas levanta es la lucha contra la impunidad de los delitos que se comenten en contra de periodistas y medios de comunicación. ¿Cuál es el papel de los organismos internacionales como al que usted pertenece?

Advertir del problema, insistir para que la respuesta institucional sea pronta y efectiva. Sin embargo, si fallan todos los mecanismos internos, las personas pueden acudir a los sistemas internacionales para obtener la protección o reparación de su derecho.

Trayendo el tema a España, ¿qué opinión le merece el caso “Egunkaria”?

Asunto complicado. Creo legítimo que un Estado se defienda contra el terrorismo, pero debe hacerlo con sumo cuidado y de manera muy justificada.

Casi un centenar de bloggers permanecen encarcelados en varios de los regímenes más totalitarios del planeta. ¿La batalla por la libertad de expresión se librará a partir de ahora en Internet?

Será el tema del próximo informe de la Relatoría. La libertad de prensa y el acceso a las nuevas tecnologías de la información son asuntos que van de la mano. Internet debe constituirse como el espacio más libre. Cuando los Estados no están dispuestos a tolerar la disidencia y usan su poder para suprimirla, es fundamental mantener su vigor y poder democratizador y, para ello, es necesario proteger a los usuarios de injerencias indebidas y denunciar estos abusos.

Tal vez te interese...

Expertos analizarán los retos de la nueva realidad en el Foro Libertad de Expresión en la Era Digital

El Foro Libertad de Expresión en la Era Digital reunirá a expertos de distintos países para analizar la censura, desinformación y acciones jurídicas y políticas contrarias a derechos humanos que se ejercen a través y con el uso de las TIC. Se realizará el 6 y 7 de octubre de 2021, organizado por Article 19 y la Fundación Friedrich Naumann.

Powered by themekiller.com